"El Señor toma este amor
de la obra maestra de la Creación para explicar el amor que tiene por su
pueblo. Y un paso más: cuando Pablo necesita explicar el misterio de Cristo, lo
hace también en relación, en referencia a su Esposa: porque Cristo está casado,
Cristo estaba casado, se había casado con la Iglesia, con su pueblo. Como el
Padre se había casado con el Pueblo de Israel, Cristo se casó con su pueblo.
Esta es la historia de amor, ¡esta es la historia de la obra maestra de la
Creación! Y delante de este recorrido de amor, de este icono, la casuística cae
y se convierte en dolor. Pero cuando este deja al padre y a la madre para
unirse a una mujer, hacerse una sola carne e ir adelante y este amor falla,
porque muchas veces falla, debemos sentir el dolor del fracaso, acompañar a
esas personas que han tenido este fracaso en el amor. ¡No condenar! ¡Caminar
con ellos! Y no hacer casuística con su situación".
"Piensa a este
diseño de amor, este camino de amor del matrimonio cristiano, que Dios ha
bendecido en la obra maestra de su Creación". Una "bendición que
nunca se ha quitado. ¡Ni siquiera el pecado original la ha destruido!" Por
ello cuando alguien piensa en esto "ve qué bonito es el amor, qué bonito
es el matrimonio, qué bonita es la familia, qué bonito es este camino y cuánto
amor también nosotros, cuanta cercanía debemos tener para los hermanos y las
hermanas que en la vida han tenido la desgracia de una fracaso en el
amor". Esto es el gran misterio de la obra maestra de la Creación. Que el
Señor nos dé a todos nosotros la gracia de entenderlo y también la gracia de no
caer nunca en estas actitudes casuísticas de los fariseos, de los doctores de
la ley".
28/2/2014. Sta. Marta.
Zenit
No hay comentarios:
Publicar un comentario